La enfermedad inflamatoria intestinal (EII) representa un conjunto de trastornos inflamatorios cró- nicos de causa desconocida que afectan al aparato gastrointestinal, siendo las más comunes la Enfermedad de Crohn y la Colitis ulcerosa. Según diferentes organizaciones médicas en el Estado Español, la EII ha aumentado de forma muy significativa en menores de 18 años.
La Unitat Funcional d’Aparell Digestiu de TGN Salut AE, la alianza que integra los tres proveedores de Salud de Tarragona , ha creado el Comité Multidisciplinar que analiza esta patología que en la actualidad afecta a unos 14.000 pacientes toda Catalunya.
-¿Qué incidencia tiene la enfermedad?
-Actualmente la incidencia de la enfermedad inflamatoria intestinal en los países desarrollados se sitúa entorno a unos 7-20 casos por cada 100.000 habitantes /año. Durante los últimos años ha experimentado un incremento significativo, y ciertamente este aumento es especialmente notorio en la edad pediátrica donde se ha triplicado el número de casos que se diagnostican cada año.
Se piensa que el incremento actual en la incidencia de estas enfermedades se relaciona con diversos factores ambientales. Entre ellos estarían el mayor uso de antibióticos de forma indiscriminada, los cambios en las costumbres alimentarias como el auge de dietas refinadas con exceso de azúcares o la utilización de diferentes conservantes, y las mejoras en las condiciones higiénicas de las últimas décadas que condicionarían que las personas menos expuestas a infecciones o condiciones insalubres en la infancia desarrollarían una respuesta inmune intestinal inadecuada frente a diferentes antígenos facilitando la aparición de una EII.
Estos factores explicarían la mayor y creciente incidencia de las enfermedades inflamatorias intestinales en los países occidentales.
-¿Se conoce la causa que la provoca?
-Las causas no están bien establecidas. La hipótesis más aceptada sugiere que existen factores genéticos que confieren una susceptibilidad individual que al interactuar con diferentes factores ambientales exógenos (patógenos bacterianos, componentes de la dieta, tabaco o ciertos fármacos) como endógenos (flora intestinal), desencadenaría una respuesta desmesurada de la inmunidad intestinal a diferentes antígenos que favorecería el desarrollo y perpetuación de la enfermedad.
Muchos pacientes son diagnosticados en la adolescencia o inicio de la edad adulta
-¿Cuáles son los síntomas más comunes?
-La Enfermedad de Crohn y la Colitis Ulcerosa comparten muchas de sus manifestaciones clínicas y extraintestinales. La EC cursa clásicamente con dolor abdominal, diarrea, cansancio, pérdida de peso, ocasionalmente fiebre, y síntomas asociados a enfermedad perianal como dolor anal y fístulas que supuran. La CU cursa con dolor abdominal, diarrea mucosanguinolenta, rectorragias y tenesmo o sensación de urgencia rectal. En ambas enfermedades pueden aparecer manifestaciones extraintestinales, siendo las más frecuentes las articulares, cutáneas, oftalmológicas, hepáticas y renales.
-¿Cómo se realiza el diagnóstico?
-A diferencia de otras enfermedades, no existe una prueba específica que establezca de forma definitiva el diagnóstico de EC o CU. El diagnóstico se realiza en base a una clínica sugestiva, análisis de sangre y heces, y la combinación de hallazgos característicos en las exploraciones complementarias que nos permiten estudiar el tracto gastrointestinal como la endoscopia digestiva, el estudio histopatológico de muestras obtenidas al biopsiar la mucosa intestinal, y las diferentes técnicas de imagen como la ecografía, TAC, y más recientemente enteroresonancia intestinal.
-¿Cómo afecta la enfermedad a la vida de los pacientes?
-Muchos de los pacientes con EII son diagnosticados en la adolescencia o inicio de la vida adulta, justo cuando están en plena formación, o comenzando su vida laboral y personal como adultos. Los efectos sobre la calidad de vida son múltiples: dolor abdominal crónico, necesidad de tener un baño disponible constantemente, supuración crónica, incontinencia fecal en algunos casos o incluso necesitar un estoma (colostomía o ileostomía). Esto repercute sobre la actividad laboral, vida personal, familiar y sobre la imagen corporal de los pacientes.
-¿Cuáles son los principales avances que se han producido en el tratamiento?
-El mayor avance terapéutico en el campo de la EII ha sido el desarrollo la de la terapia biológica, representada mayoritariamente por los anticuerpos monoclonales anti TNF. Su introducción en la práctica clínica ha supuesto un punto de inflexión muy importante para el tratamiento de los pacientes, mejorando notoriamente su calidad de vida, y su utilización ha disminuido la necesidad del empleo de corticoides, los ingresos hospitalarios y las necesidades de cirugía. Su principal inconveniente es que aunque consiguen unas tasas iniciales de respuesta muy altas, los biológicos no curan la enfermedad, y su administración continuada conlleva una pérdida de eficacia con el tiempo.
-¿Cuál es la contribución de la cirugía en el manejo de la EII?
-A pesar de los avances terapéuticos recientes, hasta un 80% de los pacientes con EC necesitarán cirugía a lo largo de la evolución de su enfermedad, tanto abdominal como perianal; y alrededor del 20-30% de pacientes con CU precisarán cirugía. El manejo por parte de un equipo especializado y dedicado disminuye la morbilidad, requerimientos y complicaciones relacionadas con la cirugía, e incluso la mortalidad en pacientes con EII.
-¿Qué puede aportar la creación delComité Multidisiplinar EII en el abordaje de esta enfermedad?
-Los casos más complejos de EII se benefician de un abordaje multidisciplinar para tomar las decisiones terapéuticas más indicadas, individualizado a cada paciente, y teniendo en cuenta su actividad tanto laboral como personal y los efectos de cada tratamiento sobre su calidad de vida.
Unos 14.000 pacientes catalanes sufren estos transtornos de causa desconocida
-¿Cómo funciona?
-El Comité tiene como objetivo ofrecer a los pacientes de la provincia de Tarragona la asistencia de mayor calidad, siguiendo las recomendaciones de sociedades científicas internacionales. Para ello reunimos a gastroenterólogos dedicados, cirujanos especializados y con especial dedicación a la EII, radiólogos, nutricionistas, y enfermería especializada, para discutir cada caso de forma individual. En ocasiones se contempla también la asistencia y colaboración de otros especialistas, como reumatólogos, oftalmólogos o dermatólogos.
-¿Cuáles son los objetivos del Comité en el futuro?
Los objetivos del Comité a cortomedio plazo serían varios:
-Crear consultas conjuntas gastroenterólogo-cirujano.
-Tener una enfermera especializada de referencia de contacto para los pacientes para agilizar consultas, resolver dudas sobre medicación, u otros problemas que puedan surgir, incluso con posibilidad de acceso telefónico o telemático.
-Mejorar la accesibilidad a los servicios, agilizar la rapidez en las visitas o exploraciones.
-Crear programas de ayuda psicológica.
-Dar mayor información y sensibilizar a la sociedad acerca del problema de la EII.
-Iniciar una mayor aproximación a los médicos de atención primaria para establecer criterios de sospecha y derivación de estas enfermedades.